lunes, 16 de agosto de 2010

Las FARC un cáncer social

46 millones de Colombianos vivimos en disparidad social (cáncer) desde hace 200 años y continuaremos haciéndolo por otros 200.

La enfermedad ha desarrollado su resistencia y parece haberse acomodado en el cuerpo con la estrategia de estar viva el mayor tiempo posible. Los vecinos sufren más o menos del mismo problema en rangos de disparidad medibles con diferentes coeficientes y está enmarcada sociopolíticamente al sur de la frontera estadounidense.

Las células cancerosas que provocan esta disparidad social son variadas y múltiples (Corrupción, Monopolios oligárquicos, grupos industriales y empresariales esclavizadores dueños de bancos y medios con los que ejercen poder, intereses nacionales y extranjeros, desigualdad social generacional, baja calidad educativa, nutrición deficiente, deficiencias sanitarias, baja cobertura en salud, curativa y reactiva sin prevención, etc.).

La telomerasa está activa en nueve de cada diez tipos de tumores cancerosos, es una sustancia que estimula la longitud de los telómeros, la sección final de los cromosomas y que permite la reproducción de las células cancerosas.

En el ámbito social la telomerasa es comparable al egoísmo, cada acción egoísta genera una continuidad de ese cáncer que la sociedad sufre desarrollando un ciclo sinfín que pareciera no tener una solución próxima.

Cada 4 anos recibimos quimioterapia presidencial de diferentes formas, no hay cura total, normalmente se ven leves adelantos que medio mejoran el estado general de la salud social, pero hay excepciones. Evitamos conscientemente tratamientos invasivos y extremos como la radiación, cirugía o amputación.

En Colombia como muchos países vecinos y lejanos hemos aprendido a vivir con el cáncer, unos lo ignoran, otros lo soportan, muchos lo combatimos y algunos lo quieren extirpar. Hay de todo en la patria y lo hacemos con pasión, pero si algo hemos aprendido en estos 200 anos es que los tratamientos milagrosos o traumáticos no nos gustan a la mayoría y en pasadas ocasiones hemos perdido más que ganado.

Los movimientos socialistas-comunistas-extremistas tornados en terroristas,han tratado de ser una solución invasiva y extrema, pero las experiencias Koreana, Iraní, Cubana, Venezolana y Boliviana no dan buenos referentes, como si lo son las Brasilera, Chilena y Polaca.

Los últimos 8 anos de antibióticos han marginado las soluciones extremistas que han mutado a cancerosas, a las fronteras, obligándolas a vivir estrechamente y allá deben mantenerse, mientras trabajamos lentamente en poner el cáncer en remisión y no en metástasis con diálogos infructuosos y genéricos que no curan.

1 comentario:

  1. Buenisimo, pero me parece que falto darle un poco mas de relevancia y amplitud al tema de las farc como cancer, como parte importante de los otros tipos de cancer que nos aquejan. Excelente comparación y muy buen texto. Un saludo

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